Canto y recuerdos

Cambian los recuerdos,  el tiempo los disfraza y transforma cada instante de los hechos. Cuando uno tiene la seguridad de la nada, duda si el pasado es
reminiscencia en la dimensión del tiempo perdido.

Entre la relatividad y el caos

Los recuerdos se revisan de manera consciente en el mundo de la fantasía, si no pueden volverse reales y joderte, despiertan emociones enterradas, remueven sentires olvidados. Si el recuerdo dejara de ser pasado y saliera de estar en la memoria, volvería a ser presente. Prefiero que permanezcan en el mundo del ensueño y la imaginación. Así, los guardas, los atesoras, lo mimas desde el momento en que te das cuenta, cosas que no volverás a hacer, momentos que no volverás a vivir. En caso contrario, quieres más, la realidad te lo niega, nos dice Manuel Cerdá de Muro de Alcoy, Alicante, historiador industrial y escritor español.

Somos tiempo de ilusión en la relatividad del caos. Ecuaciones básicas de la mecánica cuántica, dan señales, el mundo científico nos hace repensar el tiempo. El universo físico es una película, una serie de imágenes se fijan, generan ilusiones  y se mueven, ahí protagonizamos la película de nuestra vida.

Cada escena se fragmenta, el tiempo pasado se refleja en lucecitas perdidas desde un espejo roto, imágenes que son partículas de instantes cuyos nano-segundos son segmentos de la vida que se repiten, se recomponen y repiten, agitados en una tormenta que se sacude desde otras realidades, siempre de manera diferente, nos llevan muchas dimensiones del tiempo subsumidos en la ola cuántica de otras dimensiones del tiempo que estiran y encogen otras fuerzas que han remontado mil formas de tiempo. Las contradicciones y los opuestos dinamizan las innovaciones de la humanidad.

Einstein entre 1915 y 1921, publicó la Teoría general de la Relatividad, confirmó la predicción de su teoría con un eclipse solar y le otorgaron el premio Nobel de Física. En esas llegaron a Marsella los primeros molinos para el maíz que da masa para arepas y ahí se dieron las uniones familiares entre un sentido del tiempo y espacio no pensados con la relatividad de Einstein, pero al asomo de la relatividad y ese molino nacieron nuestros padres atados al calendario católico: día de San Juan Mártir, Santa Natalia Mártir y Santa Cándida, San Cayetano o San Agapito; no sé si relativo, personas cercanas a quien nació en esa fecha la describen como santa, mártir y cándida, y con un montón de hijos.

Nueva York nos llamaba

A los hijos  del siglo XX nos llegaron estilos de vida que ayudaron a imprimir nuestro carácter familiar y cultural; en dic. 12 (1915) nace Frank Sinatra, en su voz supimos que existía Nueva York, lo conocimos sin recorrerlo en el jazz, el cine y la novela El Gran Gatsby de Francis Scott Fitzgerald y otras narrativas. El imaginario llevó a muchos a migrar a Nueva York y otras ciudades que les llamaron desde las canciones. Queríamos ser parte de la noticia de irnos a esas urbes y ser parte de ellas, aplastar con el zapato en el recorrido de sus calles como a colillas de cigarrillo, esa nostalgia del pueblito donde nacimos.

Metamorfosis II – M.C. Escher – Historia Arte (HA!)

Metamorfosis

En ese mismo año 1915 Franz Kafka editó La Metamorfosis, esa mítica novela centenaria donde Gregorio Samsa se despierta transformado en un bicho gigante de barriga abombada y muchas patas. Quienes quedamos en las calles del pueblito teníamos un imaginario compartido similar al de Kafka en esa manera transformada y mítica de descubrirnos, como en la literatura, creábamos figuraciones de los parroquianos en Marsella, Apia o cualquier poblado, con sobrenombres originales para cada personaje, no nos parecían tan absurdos, describen a cada  sujeto en ese imaginario que circula por las calles.

Por ahí andaban y se emborrachaban con canciones y amores necios: El Grillo, La Marrana, Camaleón, La Pate Catre, Pela la Guama, Pate lancha, Ministro, Gumarra, Piracho, Letanías, Agonía, Mérmele, el Señor Batea y Tiembla-Tiembla. En santuario pocos sabían quien era Rigoberto, cuando postuló su candidatura a la alcaldía organizó su campaña en esa realidad que todos le había creado y llenó el pueblo de avisos: «voten por Rama Seca«.

El origen familiar de Kafka, tan semejante al nuestro y esa vida impulsada a obrar con eficacia para conseguir dinero y trajinar en el vacío que algunos llenan con el culto al patrón, nos llamaba a seguirlo y ver el mundo de muchas formas.

También en ese tiempo Max Scheler publica “El formalismo en la ética y la ética de los valores materiales”. Nuestro espíritu regional es la imagen de una familia extensa que no se agota en las combinaciones de apellidos, existen tensiones entre las lógicas de la razón y la sensibilidad de las emociones, a veces somos personas razonadoras; más que eso, exaltados en las calles o en el estadio nos unimos en la inmensa cadena del afecto y la rivalidad. Afirma el historiador Javier Cortés: contradicciones, conciliación, el afecto y el amor, son básicos en la formación y el progreso.

Comments

4 respuestas a “Canto y recuerdos”

  1. Avatar de tachimio

    Bel post. Un sorriso. Isabella

    Me gusta

    1. Avatar de guillergalo

      Gracias por tus palabras. Siempre te sigo Isabela.

      Le gusta a 1 persona

      1. Avatar de tachimio

        Gracias guillergalo. Isabella

        Me gusta

  2. Avatar de guillegalo

    Esta entrada fue publicada en mayo de 2019, la he retraído como un recuerdo tormentoso. Caprichos míos cuando el sol naranjado que refleja el mar Pacífico en el occidente colombiano me deja viendo luces.

    Le gusta a 1 persona

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.